Clavadismo
Todo lo que debes saber sobre los clavados
Belleza, destreza y coraje... Pocos deportes son tan vistosos y desafiantes como los clavados y aquí te explicamos todo sobre él.
¿Qué duda cabe? Los clavados son uno de los deportes más vistosos que existen. Si coincides con nosotros, entonces no puedes perderte este artículo en el que explicaremos todo sobre esta disciplina.
Qué son los clavados
Los clavados son un deporte que consiste en saltar al agua desde un punto fijo o un trampolín. Puede practicarse en piscinas, lagos, ríos y mares.
Preda consigue en Cap Dramont la que es su primera victoria
© Dean Treml / Red Bull Content Pool
El salto ganador de Catalin Preda en Francia
© Romina Amato/Red Bull Content Pool
Es un deporte que combina belleza, destreza y coraje. La historia de los clavados comenzó en la Antigua Grecia y hoy en día es regulado por la Federación Internacional de Natación (FINA), al igual que la natación, waterpolo y nado sincronizado.
Jonathan Paredes y La Ruta de Xibalba
Categorías de clavados
Como ocurre en casi todos los deportes, dentro de los clavados existen varias categorías. A nivel olímpico existen cuatro, tanto para hombres como mujeres:
- Trampolín de 3 metros.
- Trampolín de 3 metros sincronizado.
- Plataforma de 10 metros.
- Plataforma de 10 metros sincronizado.
Por supuesto, los metros indican la altura a la que se encuentra la plataforma desde donde se salta; si es sincronizado, significa que los clavadistas saltan en pareja; y el trampolín es un punto vibrátil que se utiliza para rebotar, mientras la plataforma es un punto fijo.
Aquí tienes un ejemplo de clavados sincronizados desde una plataforma de 10 metros. Es la ronda final de clavados femenil de la Diving World Cup 2021:
También existen los saltos de gran altura, como los que se practican en Red Bull Cliff Diving World Series, en el que los clavadistas saltan desde más de 20 metros de altura.
Por su parte, las medidas de las fosas de clavados dependerán de la altura del salto. En competiciones olímpicas, debe ser de al menos 5 metros. A medida que se eleva la plataforma, el clavadista alcanzará mayor velocidad y necesitará una fosa más profunda.
Tipos de clavados
Clavados de acantilado.
© Romina Amato/Red Bull Content Pool
Todo eso en cuanto al contexto del salto. Pero si hablamos de los saltos en sí, estos se diferencian por la posición en el despegue, la dirección del giro, etc.
En este sentido, los clavados se dividen en 6 grandes grupos:
- Hacia delante: El atleta se coloca de frente y durante la caída gira en la misma dirección.
- Hacia atrás: Es completamente al revés, ya que el clavadista se coloca de espaldas al vacío y rota en esa misma dirección.
- Inverso (u Holandés): Una combinación de los anteriores, en la que hay que pararse de frente y rotar hacia atrás.
- Hacia dentro: De espaldas y con rotación hacia el trampolín o plataforma.
- Con giros: Incluye cualquiera de los casos anteriores, pero el salto debe incluir giros sobre el eje cabeza-pies.
- Parada de manos: En lugar de comenzar parado, hay que hacer en la posición del pino, la vertical o como tú llames a estar parado de manos.
La puntuación
2 minutos
Así se consigue un salto de 10
Desde el 2009 en las Series Mundiales de Red Bull Cliff Diving hemos visto 3.952 saltos, pero solo 104 han logrado un 10.
Entra en detalles en el mundo de los clavados
Por último, debes conocer cómo puntúan los jueces. Lo cierto es que cada salto ocurre en apenas una fracción de segundo. Para el ojo no entrenado, es prácticamente imposible entender todo lo que ocurre durante un clavado.
Sin embargo, los jueces son expertos en el tema y son capaces de evaluar una serie de aspectos:
- Aproximación: Consiste en evaluar la posición de salida, que debe ser con el cuerpo recto y los brazos extendidos.
- Despegue: Cómo el atleta se despega del punto de salto. Debe ser de modo controlado.
- Elevación: La altura que alcanza el atleta.
- Ejecución: Los giros, rotaciones, etc., que el clavadista realiza durante la caída libre.
- Entrada: La posición de entrada al agua. En pocas palabras, el objetivo es salpicar la menor cantidad de agua posible.
Los distintos jueces evalúan y luego se elimina la calificación más alta y la más baja; se suman los puntos que quedaron y eso se multiplica por el grado de dificultad del salto. Y ahí tienes la puntuación del salto.